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Cambiar ciertos hábitos, a cualquier edad, puede tener un impacto muy positivo en la salud y el bienestar de nuestros seres queridos. Entonces, ¿se pueden cambiar los hábitos de los adultos mayores?
Sí, se puede… pero no es fácil.
Pensar cuesta trabajo. ¡No es broma! El cerebro es el órgano que más energía utiliza y, por ello, siempre busca maneras de ahorrarse el esfuerzo. Así surgen los hábitos que, esencialmente, son rutinas que el cerebro repite una y otra vez hasta que se vuelven automáticas.
La realidad es que pasamos buena parte de la vida en automático, es decir, dejamos que el cerebro actúe de manera autónoma para economizar energía cognitiva. Es por eso que resulta tan angustiante ir en contra de la rutina y que naturalmente resentimos los cambios.
Los hábitos de los adultos mayores están sumamente arraigados y puede ser complicado alejarse de ellos, pero no imposible.
Factores determinantes para el cambio de hábitos de los adultos mayores
¿Cómo cambiar los hábitos de los adultos mayores? ¡Ayudarles a adquirir nuevos hábitos! Los nuevos hábitos deben practicarse con regularidad para fortalecerse. En algunos casos, es necesario realizar intervenciones comportamentales e incluso usar medicamentos. Estos son algunos factores determinantes si piensas cambiar un hábito en ti misma o en tu ser querido:
El proceso para cambiar los hábitos de los adultos mayores comienza con el deseo de hacerlo. Es decir, él o ella debe tomar la decisión de cambiar, de lo contrario es muy probable que el proceso fracase, incluso con técnicas avanzadas como medicamentos o hipnosis. Por ejemplo, aquellos pacientes geriátricos con alcoholismo que eligen sus propios objetivos de rehabilitación tienen mayor probabilidad de éxito que si se les impone un régimen (Emiliusen et al., 2019).
También es importante considerar las posibilidades de cada persona. Por ejemplo, un adulto mayor que nunca ha hecho ejercicio no puede correr un maratón de un día para otro. De igual manera, realizar cambios en la dieta de la noche a la mañana puede resultar contraproducente. Es fundamental evitar los cambios drásticos y siempre consultar con el geriatra en caso de duda.
Cuando tenemos que rendirle cuentas a alguien, es más probable que tomemos medidas para cambiar. En el adulto mayor, esto es más fácil cuando sigue participando en la vida de su familia y su comunidad. Por ejemplo, dos de los peores hábitos de los adultos mayores, la inactividad y el aislamiento, desaparecen cuando se involucran en actividades comunitarias.
Finalmente, existen muchas intervenciones comportamentales que han demostrado tener éxito para cambiar los malos hábitos de los adultos mayores, ya sean nutricionales, del sueño y adicciones como el alcoholismo y el tabaquismo. Algunas intervenciones comportamentales están diseñadas para mejorar los síntomas de la incontinencia, que es uno de los motivos frecuentes que mencionan los adultos mayores para dejar de participar en la vida diaria. El profesional dedicado a la implementación de estas técnicas es el gerontólogo.
Los peores hábitos de los adultos mayores y cómo cambiarlos
Cada abuelo es diferente y se enfrenta a retos únicos. Sin embargo, estos son los malos hábitos de los adultos mayores más frecuentes.
Mala nutrición (malnutrición, desnutrición y problemas dentales)
En un estudio en un hospital geriátrico, ¡el 82.4 % de los pacientes tenían malnutrición (Kagansky et al., 2005)! Esto es un problema serio, pues estos pacientes estaban bajo supervisión médica. Además, la malnutrición era un predictor de resultados malos a lo largo de la hospitalización: pérdida de la independencia, incapacidad y muerte. Es decir, la mala nutrición parece amplificar todos los otros problemas de salud.
Al tratarse de comida, es muy difícil cambiar las ideas y los gustos de una persona. Sin embargo, hay dietas deliciosas y saludables que hacen que esto sea más sencillo. La dieta mediterránea mexicanizada es muy sabrosa y los ingredientes son fáciles de conseguir en nuestro país.
Alcoholismo y tabaquismo
El alcoholismo en el adulto mayor está relacionado con demencia y deterioro cognitivo. Por su parte, el tabaquismo se relaciona con incontinencia y toda suerte de afecciones respiratorias y cardiacas.
El problema detrás del alcoholismo y el tabaquismo es que existe una dependencia farmacológica y psicológica. Es decir, se suele tratar de adicciones.
Malos hábitos de los adultos mayores respecto al sueño
Las alteraciones del sueño se relacionan con deterioro cognitivo en el adulto mayor. Existe una correlación entre malos hábitos del sueño y la demencia.
Afortunadamente, con buena higiene del sueño, es posible aminorar muchos de los problemas asociados al dormir:
- Evitar el consumo de alcohol o estimulantes como el café
- Pérdida de peso (en casos de obesidad y algunos tipos de apnea)
- Reducir la duración de las siestas a 30 minutos
- Irse a dormir y despertarse todos los días a la misma hora
Si las alteraciones no se pueden manejar con higiene del sueño, es posible que el geriatra recete algún medicamento hipnótico (pastillas para dormir).
¿Tienes una historia de éxito? ¿Has logrado cambiar un hábito en ti misma o en un ser querido? ¿Te has enfrentado a malos hábitos de los adultos mayores en tu familia? ¡Nos encantaría escucharte!
Referencias
Avidan, A. Y. (2005). Sleep in the geriatric patient population. Seminars in Neurology, 25(1), 52-63.
Emiliussen, J., Andersen, K., Nielsen, A. S., Braun, B. y Bilberg, R. (2019). What do elderly problem drinkers aim for? Choice of goal for treatment among elderly treatment-seeking alcohol-dependent patients. Nordic Studies on Alcohol and Drugs, 36(6), 511-521.
Kagansky, N., Berner, Y., Koren-Morag, N., Perelman, L., Knobler, H., & Levy, S. (2005). Poor nutritional habits are predictors of poor outcome in very old hospitalized patients. The American Journal of Clinical Nutrition, 82(4), 784-791.
Zbikowski, S. M., Magnusson, B., Pockey, J. R., Tindle, H. A., & Weaver, K. E. (2012). A review of smoking cessation interventions for smokers aged 50 and older. Maturitas, 71(2), 131-141.
Avidan, A. Y. (2005). Sleep in the geriatric patient population. Seminars in Neurology, 25(1), 52-63.
Emiliussen, J., Andersen, K., Nielsen, A. S., Braun, B. y Bilberg, R. (2019). What do elderly problem drinkers aim for? Choice of goal for treatment among elderly treatment-seeking alcohol-dependent patients. Nordic Studies on Alcohol and Drugs, 36(6), 511-521.
Kagansky, N., Berner, Y., Koren-Morag, N., Perelman, L., Knobler, H., & Levy, S. (2005). Poor nutritional habits are predictors of poor outcome in very old hospitalized patients. The American Journal of Clinical Nutrition, 82(4), 784-791.
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