José comenta que su cuñado falleció en el año 2015 “y para que no se quedara sola fuimos mi esposa y yo por ella. Nos dijeron que era urgente ponerle una válvula. Mejoró muchísimo, pero el daño ya estaba hecho, tiene un problema degenerativo”. Para ese entonces no sabían de la solución de la grúa de Abuelo Cómodo.
En el año 2022 ya casi no se movía, “producto de la hidrocefalia no tratada a tiempo”, reitera. Debido a que Marthita no comía, José acudió a médicos para que le colocaran a su hermana un tubo de gastrostomía, “nos ayudó muchísimo, pero a los ocho días, en un movimiento de pasarla de la silla de ruedas a la cama, le arrancamos el tubo, se le tuvo que volver a poner. El doctor dijo: ya no la muevan. Entonces le empezaron a salir llagas, y yo estaba desesperado”.
Menciona que, tras el accidente, las enfermeras que cuidan a Marthita ya no querían moverla: “estaban muy nerviosas, no la querían volver a sacar porque tenían miedo de que se le fuera a arrancar otra vez”.
Para no volver a lastimar a Marthita, José buscó en internet “cómo mover a un enfermo inmóvil, y me salían alternativas con enfermeros entrenados, varias técnicas que llegué a ver, hasta que en una de esas me salió que Abuelo Cómodo tenía una grúa para mover a las personas y la compramos”.
Menciona que desde que tienen la grúa eléctrica, las enfermeras de Marthita ya la pueden mover sin miedo de arrancar el tubo de gastrostomía, porque la grúa les permite cambiarle la ropa, levantarla para pasarla de la cama a la silla de ruedas, y de esta forma pasearla por el departamento y las áreas verdes o llevarla al automóvil para ir al doctor. José y las enfermeras coinciden en que la grúa cambió y mejoró la vida de todos.
Además de la grúa eléctrica, José adquirió un colchón antillagas y lo necesario para que su hermana se sintiera cómoda, “la pobre pasó por tantos hospitales que lo último que quiero es hacer que se sienta en un hospital”.
Agradece a las enfermeras que le ayudan a cuidar a su hermana, “porque es la combinación de gente profesional con responsabilidad y darles los elementos para que hagan mejor su trabajo (…) Esta grúa es tecnología, trae lo necesario para poder mover a mi hermana, que era la preocupación que yo tenía”.
A las familias que pasan por una situación similar, José les pide informarse “porque la medicina ha progresado muchísimo (…) Podemos ir guiando a los doctores, los doctores ven a tantos pacientes y nosotros solo vemos uno, ayudarle al doctor sin que signifique hacer el trabajo del doctor, pero aprovechar la tecnología, ahí está”.
“Desde que tenemos la Grúa, las enfermeras ya pueden mover a mi hermana. (…) Nos permite cambiarle la ropa, levantarla de la cama a su silla de ruedas y pasearla por el departamento y las áreas verdes. ”
José asegura que ver a su hermana sufriendo le quitó el sueño, “ahora ya puedo dormir, antes hablaba a cada rato para saber qué hacíamos, cómo iba la herida, si se quejaba y ella sufría, porque la herida estaba horrible. Qué más quisiera yo que hubiera algo que la levantara para que volviera a nadar y a caminar, ya no es posible, pero por lo menos ya está cómoda, sin sufrimiento”.
Te invitamos a ver el video completo de la Historia de Éxito de José aquí.
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